Voy a continuar ofreciendo más datos clínicos de este tipo de tumor y como mencione en la comunicación pasada, enunciare los procedimientos de Radiología Intervencionista existentes para el tratamiento de esta enfermedad; de manera inicial ya que algunos fueron mencionados con anterioridad, y les comentare de los recientes y mas exitosos que existen, siempre teniendo en cuenta las condiciones clínicas del paciente en el momento de conocerlo.
El hepatocarcinoma no es un cáncer hereditario, pero existen enfermedades hereditarias que favorecen el desarrollo de cirrosis y por tanto de hepatocarcinoma, como el déficit de alfa-1-antitripsina (es una afección en la cual el cuerpo no produce suficiente cantidad de esta sustancia, una proteína que protege de daño a los pulmones y al hígado. Esta afección puede llevar a que se presente enfermedad pulmonar obstructiva crónica y cirrosis) o la hemocromatosis (enfermedad hereditaria que condiciona que el cuerpo absorba demasiado hierro de los alimentos que se ingieren y el exceso de hierro se almacena en los órganos, especialmente el hígado, el corazón y el páncreas), por lo que es necesario vigilar con mas detenimiento a este tipo de pacientes.
El hepatocarcinoma no es contagioso, pero algunos de los factores que predisponen a su desarrollo si pueden serlo, como la infección por el virus de la hepatitis B o hepatitis C, por lo que es necesario evitar riesgos de contagio de estas patologías, sobretodo por transfusiones sanguíneas sin control estricto, por otros fluidos corporales en el caso de la hepatitis B, o por agujas contaminadas, tatuajes y múltiples parejas sexuales, hetero u homosexuales sin prevención adecuada en el caso de la hepatitis C.
El pronóstico del hepatocarcinoma en general no es bueno. De acuerdo a la clasificación existente de Okuda, que esta basada en 4 criterios, se podrán crear 3 diferentes estadios o etapas clínicas de esta patología tumoral maligna, y son
1.- El tumor ocupa mas del 50% del hígado.
2.- Existe ascitis (liquido libre en la cavidad abdominal)
3.- La bilirrubina es mayor de 3 mg/dl en el análisis de sangre.
4.- La albúmina es menor de 3 g/dl en el análisis de sangre.
De tal manera que al valorar los criterios anteriores, los estadios son los siguientes:
Estadio I.- 0 criterios. Supervivencia media sin tratamiento es de 1 año.
Estadio II.- 1 o 2 criterios. Supervivencia media sin tratamiento, entre 2 y 3 meses.
Estadio III.- 3 o 4 criterios. Supervivencia media sin tratamiento es de 1 mes.
Las opciones existentes actualmente de curación del hepatocarcinoma son:
1.- Cirugía. Es la única posibilidad de curación. Sin embargo, pocos son los pacientes que pueden ser candidatos a la operación debido a la extensión, al tamaño o a la localización del tumor. Además, se requiere que la función del hígado no sea muy mala dado que, al quitar una parte del hígado, al hígado restante puede quedarle muy poca capacidad para mantener una función aceptable.
2.- Trasplante de hígado. Sólo puede realizarse en los casos que se descarte extensión del tumor fuera del hígado.
En los casos que no puedan realizarse las acciones previas, la única opción es realizar tratamientos paliativos para aumentar la supervivencia y mejorar la calidad las condiciones de vida del paciente y dependerá de la clínica del cada paciente:
1.- Quimioembolización de una arteria del hígado. Consiste en realizar un cateterismo e inyectar directamente dentro de una arteria del hígado una medicina contra al cáncer. Posteriormente se puede taponar la arteria que da riego al tumor, intentando así que, al no recibir riego, el cáncer se reduzca.
2.- Tratamiento de ablación con radiofrecuencia o crioablación. Consiste en la administración local de una energía térmica por radiofrecuencia o congelamiento
3.- Radioterapia. Preferentemente aplicada de forma precisa sobre el tumor (estereotáctica), que poco resultado terapéutico.
4.- Inyección de alcohol o de ácido acético en el interior del tumor. Para ello se punciona el tumor a través de la piel guiado por ecografía o tomografía computada-
5.- Quimioterapia general. El sorafenib es un fármaco que ha demostrado una mejoría en la supervivencia de los pacientes con hepatocarcinoma administrado sólo o combinado con otros medicamentos, aunque condiciona efectos secundarios que hacen que el paciente abandone el tratamiento.
En la siguiente comunicación, hablare de los tratamientos que se realizan a través de arterias que irrigan a este tipo de tumores.