La Radiología Intervencionista y aneurisma de aorta abdominal

En esta comunicación, continuare comentando con mas detalle los procedimientos de tratamiento mediante Radiología Intervencionista de mínima invasión, en los casos de pacientes con aneurisma de aorta abdominal.

Si un aneurisma es pequeño puede no requerir más tratamiento que la vigilancia periódica, con tomografía computada o con ultrasonido-doppler para determinar si el aneurisma está creciendo. Algunos aneurismas permanecen pequeños con un tamaño estable y no suponen riesgo para el paciente. Cuando un aneurisma alcanza un diámetro de 5 centímetro en la aorta abdominal, o bien crece más de 0.5 centímetros en su diámetro en un periodo de 6 meses, su tratamiento es necesario para evitar su ruptura. Una aorta normal tiene aproximadamente 2.3 centímetros de diámetro en el caso de los varones y 1.9 centímetros en el caso de las mujeres.

Hay dos maneras de tratar un AAA mayor de 5 cm:

Reparación quirúrgica convencional: El tratamiento tradicional para el aneurisma de aorta abdominal es la realización de una intervención quirúrgica mayor en la que un cirujano cardiovascular abre el abdomen hasta llegar a la arteria enferma y una vez allí reseca el aneurisma y lo sustituye por un tubo sintético que se sutura por encima y por debajo en la arteria enferma sustituyendo el área aneurismática y restableciendo el flujo sanguíneo. Se elimina el aneurisma y se elimina también el riesgo de ruptura y muerte. Esta cirugía es una intervención mayor que requiere anestesia general profunda, ingreso hospitalario y precisa unos 3 meses hasta la recuperación completa del paciente. La mortalidad perioperatoria de esta intervención está en torno al 5% pero su gran ventaja es que cuando todo finaliza los resultados son excelentes y el problema generalmente queda resuelto de por vida.

Reparación endovascular: Esta técnica es mínimamente invasiva. Se realiza con sedación. No es una intervención quirúrgica propiamente dicha, es un tratamiento mediante cateterismo que consiste en la introducción de un catéterna través de su arteria aorta enferma, mediante la punción o mínima incisión en las ingles. Guiándonos por rayos x se coloca de manera muy precisa una endoprótesis que se introduce plegada a través de la ingle y una vez colocada en el sitio preciso, el radiólogo intervencionista la desplega de modo que se expande para quedar ajustado sobre la arteria del paciente excluyendo y aislando el aneurisma de aorta abdominal. La mortalidad perioperatoria, el tiempo de ingreso hospitalario y la recuperación postoperatoria son mucho menores que con la cirugía tradicional. Generalmente a los pocos días se puede estar haciendo vida normal. El problema es que con el tratamiento endovascular no hay todavía estudios que avalen la durabilidad de las prótesis a largo plazo entre 10 y 25 años. Esta técnica que se ha popularizado en los últimos años y es altamente segura y eficaz, se considera todavía como un tratamiento en evolución y susceptible de mejora.

Para lograr los objetivos deseado y llegar a tener éxito con éste procedimiento de Radiología Intervenvcionista de mínima invasión, es necesario cumplir con los siguientes conceptos:

Estudios de imagen protocolizados, con imágenes diagnósticas de calidad excelente y que el grupo de radiología intervencionista tenga un entrenamiento y certificación reales; estos son esenciales para diagnosticar y para implementar el manejo con prótesis endovasculares y así lograr la exclusión de aneurisma de aorta abdominal. Las modalidades de imágenes óptimas, así como los protocolos pueden variar durante las etapas antes, durante y después del procedimiento. Pueden variar de paciente a paciente. No obstante, existen metas que se deben de cumplir en todos los pacientes para lograr éxito al final.

Los estudios de imagen con los que se cuenta para el estudio diagnóstico de excelencia incluyen :

Radiografías de tórax y abdomen, fluoroscopía digital, tomografía computarizada, ultrasonido-doppler, ultrasonido intravascular, resonancia magnética y angiografía digital con sustracción de imágenes. Se debe de tener en cuenta que un solo procedimiento no es útil para resolver todas las interrogantes, ya que cada uno tiene debilidades y fortalezas, siendo complementarios. Para utilizarlas, se deberá de considerar costo relativo, exposición a la radiación, invasividad, tolerancia al contraste, disponibilidad, reproducibilidad, fácil de interpretar y realización en todos los pacientes.

Por lo que, se han recomendado estudios, previos al procedimiento, durante el procedimiento y después del procedimiento.

Continuaré en la siguiente comunicación con la descripción de estos estudios en sus diferentes etapas del procedimiento de Radiología Intervencionista para lograr la exclusión del aneurisma de aorta abdominal, hasta lograr que sea un procedimiento completamente exitoso.